Gernika Rugby Taldea: El año de los basurdes

Atrás queda aquella fatídica mañana de abril en Alcobendas en la que se confirmaron los peores presagios para el XV de la villa foral. Despidiéndose de la División de Honor tras 10 años en los que los basurdes escribieron su nombre con letras doradas en la historia del rugby estatal, los llantos, la impotencia y la tristeza de aquella jornada han dejado paso a la alegría, las ganas y a la ilusión por retornar a la máxima competición nacional. 

Firmando una fase regular de ensueño con pleno de victorias, los pupilos de Eduardo Maidagan opositan al ascenso con una carta de presentación a la altura de muy pocos. Tras una atípica temporada marcada por la pandemia, Maida explica que: “nosotros seguimos con el trabajo que empezamos el año pasado. Veníamos trabajando bien y estábamos ahí para jugar playoffs. Por desgracia llegó la pandemia y se suspendió la liga, y nuestra idea desde un primer momento era la de seguir con la tónica y con la rutina marcada”. Además, el preparador del conjunto verdinegro ensalza el gran papel de la camada de jugadores de la casa: “la gente de casa, que son los que verdaderamente han conseguido tirar del equipo, ha dado un paso adelante. Si a eso le añadimos la aportación de los fichajes, que se han integrado muy bien desde el primer día, nos ha hecho llegar a donde estamos”. Es, en esa misma línea que  Iker Olaeta, capitán del cuadro gernikes, afirma que: “está siendo un año muy bueno en los resultados y en el equipo. Hemos cuajado un buen equipo y las cosas están funcionando bien”.

Sin embargo, las incógnitas y las dudas sembradas por el Covid-19 marcaron la preparación del curso 20/21. “Con la nueva normativa sabíamos que teníamos que ir a ganar todos los partidos para estar arriba por si se volvía a parar la liga. Con el matiz de que si se jugaba el 75% de la competición podría haber, otra vez, un ganador de despachos, nuestra idea era la de estar ahí arriba desde el primer momento para que no nos volviera a pasar lo del año pasado”, explica Maida. A pesar del gran papel de los basurdes, que siguen invictos hasta la fecha, Maida comprende que luchar por el ascenso será una misión complicada: “hay que jugar todos los partidos. Una semifinal es una semifinal, los 8 equipos que hemos entrado a esta fase somos 8 grandes equipos del rugby español, y vamos a ver cómo termina esto porque aquí hay que jugar todos los partidos y no va a ser fácil”. 

Tras poner la primera piedra de su ambicioso proyecto la pasada temporada, los gernikeses optaron por volver a presentar su candidatura en la carrera por el ascenso: “la directiva apostó por seguir con la tónica de luchar por el ascenso porque es una cosa muy grande para un pueblo como Gernika, por lo que nos genera directamente en cuanto a afición, o en cuanto a traer fichajes, aunque sabemos que es algo muy complicado. Todos quieren estar ahí, pero a día de hoy somos semifinalistas así que seguimos vivos en la batalla”, explica Maida. 

Alentados por un pueblo volcado con su equipo de manera incondicional, los basurdes vivirán la segunda etapa de su sueño ante el Pozuelo RU con una plaza en la final en juego. Cargados de ilusión, el capitán del conjunto verdinegro verbaliza el sentir de los suyos: “Nuestro objetivo está claro, ascender a División de Honor. Al final sería bonito volver después de haber vivido el descenso, y los chicos tenemos muchas ganas de luchar por el objetivo y de llegar hasta la final y ver si podemos poner el broche de oro a la temporada con el ascenso”.

Entrando en la fase más decisiva de la temporada, y con el ocaso de la competición más cercano, Urbieta dictará sentencia. Son dos los partidos que separan a los cuatro protagonistas de cumplir el sueño de retornar a la División de Honor y, pase lo que pase en la segunda entrega de los playoffs, una cosa está clara: hay Gernika para rato. 

Anuar Gómez.