Hay días que cobran una importancia significativa. Días que, con un chasquido, cambian el devenir de las personas. Ese es el caso de Hame Faiva. Y es que el neozelandés  no olvidará jamás la tarde del 30 de octubre en Madrid. 

Tras su paso por Waikato y los Blues del Super Rugby, Faiva hizo las maletas y apostó todo a nada a un nuevo y emergente rugby. Plasmando su firma con Benetton Treviso en 2017, el ‘hooker’ comenzó a hacerse un nombre en el rugby italiano. 

El salto a la internacionalidad

El destino guarda un lugar especial a todo aquel decidido a aprovechar las oportunidades. El debut soñado de Faiva con su país de acogida fue tan solo la antesala de lo que estaba por llegar. “Hubo una atmósfera de rugby increíble en El Central, todos estamos muy contentos de poder ver a la gente de vuelta a los estadios. La afición hace el rugby y sin ellos el deporte pierde mucho. Respetamos muchísimo todo lo que aporta la afición. Ha sido algo increíble jugar el primer partido del tour aquí, en España” declara Hame. 

Jugando su primer partido con el combinado de Italia ‘A’, segunda selección del país transalpino, el primera línea explica que “ha sido un partido muy duro para todos. España se ha mostrado muy dura aquí, en su casa. Este ha sido mi primer partido para Italia, así que estoy muy, muy orgulloso de poder representar a Italia. Sumar mi primer ‘cap’ contra una selección tan dura como España ha sido increíble, así que estoy muy agradecido”. Además, el neozelandés explica que: “solo quiero dar todo de mi. Cada vez que tenga el honor de poder representar a Italia, sé que represento a la gente italiana además de a mis amigos y a mi familia que está en Nueva Zelanda y en Tonga. Estoy muy, muy agradecido de que Italia haya contado conmigo y de haber podido sumar mi primer partido con ellos”. 

Sin saberlo, el debut de Faiva coincidió con una posterior convocatoria del ‘hooker’ con Italia para los partidos de la ventana de otoño. La alegría, la pasión y la fortaleza de Hame no ha pasado desapercibida para el staff de una Italia a la que, a buen seguro, aportará desde su pasado y su prometedor presente. 

Anuar Gómez.